sábado, 24 de enero de 2009

Bruselas propone autorizar la plantación de dos variedades de maíz transgénicos

Se trata de las semillas de maíz, BT-11 de Syngenta , y BT-1507 de Pionneer y Dow Agrosciences. El comisario de Medio Ambiente, Stavros Dimas, pidió el año pasado que no se autorizasen estas variedades, hasta que hubieran garantías de efectos inocuos sobre la biodiversidad.
Sin embargo, el portavoz comunitario, Michael Mann, ha afirmado que ha sido el Colegio de Comisarios en pleno, incluido Dimas, el que ha aprobado esta propuesta de autorización, después de que la Agencia Europea encargada de la Seguridad de los Alimentos asegurara que estas semillas genéticamente modificadas por biotecnología, no presentan riesgos para las personas, ni tampoco para el medio ambiente.
Por otra parte, Bruselas ha solicitado que se retire la prohibición de cultivar otra variedad de maíz transgénico, el MON-810 de Monsanto, en Grecia, Francia y Hungría. La Autoridad Europea para la Seguridad Alimentaria (EFSA) ha asegurado que "no existe ninguna evidencia de riesgo para la salud humana, ni para el Medio Ambiente".
El Ejecutivo comunitario ha instado a levantar las restricciones y el Colegio ha anunciado que tomará medidas contra Francia, Grecia y Hungria por haber prohibido el cultivo de la variedad MO-810, apuntó Mann.
El Comité Regulador, formado por expertos de los veintisiete, debe pronunciarse y lograr una mayoría cualificada para adoptar la decisión. Si los Estados miembros no llegan a un acuerdo, el asunto pasará al Consejo de Ministros. En el caso de Hungría, ya se ha pronunciado en contra, así que son los ministros de Medio Ambiente los que tienen que tomar la decisión. Si tampoco consiguen un acuerdo en el plazo de tres meses, la propuesta volverá a la mesa de la Comisión Europea para su adopción definitiva. La organización Greenpeace se ha manifestado en contra, porque si se autoriza la plantación de estos transgénicos se llevará a cabo sin haberse revisado el sistema de autorizaciones, tal y como solicitaron los propios ministros de Medio Ambiente el diciembre pasado.

Fuentes: Euronews, Consumer Eroski